
La mediación Penal es una herramienta que forma parte de una intervención mucho más amplia y que es la Justicia Restaurativa. En Justicia Restaurativa podemos alcanzar la posibilidad de facilitar encuentros en distintas modalidades entre víctimas y victimarios. El objetivo es la reparación de la víctima, la respuesta a sus preguntas y necesidades y por otro lado conseguir que el investigado o condenado se acerque a la reinserción.
Beneficios de la mediación penal
Reparación del daño
La mediación penal brinda la oportunidad de centrarse en la reparación del daño causado a las víctimas.
Participación activa de las partes
La mediación penal fomenta la participación activa de las partes involucradas, incluyendo a la víctima y al victimario.
Prevención de la reincidencia
La mediación penal puede contribuir a prevenir la reincidencia y favorecer así a la reinserción como beneficio personal y social.
Confidencialidad
Lo que se comenta y expone en los encuentros queda sujeto a la máxima confidencialidad no pudiendo perjudicar judicialmente a las partes. Y preservando la intimidad de los participantes.